En Grand Rapids, Minnesota, Myrna Peterson, quien vive con cuadriplejia, ve una oportunidad para superar el aislamiento y la soledad que enfrentan las personas con discapacidades en áreas rurales mediante vehículos autónomos. En un proyecto piloto llamado goMARTI, cinco furgonetas autónomas han proporcionado 5,000 viajes desde 2022, controladas por inteligencias artificiales el 90% del tiempo, ofreciendo una alternativa flexible a los sistemas de transporte público tradicionales.
Aunque la tecnología de vehículos totalmente autónomos aún se encuentra en desarrollo, compañías como Waymo, vinculada a Google, continúan avanzando en servicios de taxis totalmente autónomos en varias ciudades. Peterson y otros creen que los vehículos autónomos representan un paso hacia una forma de transporte más segura, especialmente para los 25 millones de estadounidenses con movilidad limitada.
El proyecto goMARTI, respaldado con más de 13 millones de dólares provenientes de fuentes federales, estatales y locales, utiliza minivans Toyota equipadas con tecnología avanzada. Aunque los usuarios actualmente necesitan asistencia para acceder a la furgoneta, investigadores están explorando métodos para automatizar este proceso, abriendo la posibilidad de que las personas que utilizan sillas de ruedas se beneficien plenamente de los vehículos autónomos.
Los defensores, como Tom Foley, director ejecutivo del National Disability Institute, ven en los vehículos autónomos una solución para combatir la soledad y la falta de transporte, especialmente en áreas rurales. Aunque aún hay retos por superar, proyectos como goMARTI marcan un paso hacia un futuro más inclusivo e independiente para las personas con discapacidades.