Las carreteras gallegas se han convertido en el escenario de pruebas autorizadas para vehículos autónomos, con el respaldo del Centro Automobilístico de Galicia (CTAG) y el Instituto Nacional de Investigación sobre el Automóvil (INSIA). Este enfoque riguroso, avalado por la Dirección General de Tráfico (DGT), tiene como objetivo evaluar parámetros específicos en vías abiertas al tráfico, después de análisis previos en entornos controlados como laboratorios y circuitos cerrados.
Francisco Sánchez, director de la División de Electrónica y Movilidad Inteligente en el CTAG, destaca la colaboración entre ambas instituciones, subrayando la importancia de establecer un servicio integral de ensayos. Este servicio se alinea con las normativas de la instrucción VEH-2022-07 de la DGT, proporcionando un protocolo sólido para la circulación segura de vehículos autónomos en vías públicas.
A pesar de la estricta seguridad implementada, existe un enfoque cauteloso durante los ensayos en carreteras públicas. La presencia de un conductor en el puesto de piloto y la monitorización continua de datos durante el trayecto son parte de las medidas destinadas a prevenir cualquier eventualidad. El objetivo final de este esfuerzo conjunto es consolidar a Galicia como un referente en el desarrollo y validación de vehículos autónomos y conectados, destacando la oportunidad única que esto representa para España y la región gallega.